Repensar para transformar

El Mag. Marco Barboza Tello explora los cruces entre derecho, género, salud, emociones y filosofía. Con una trayectoria marcada por la investigación, la gestión pública y el análisis de las políticas públicas, hoy coordina un diplomado que desafía las estructuras tradicionales de la masculinidad y busca prevenir la violencia desde la ampliación teórica y el reajuste estratégico.

Hay decisiones que se explican mejor con la biografía que con el currículum. El Mag. Marco Barboza Tello eligió estudiar Derecho por un compromiso con los derechos humanos. Pero fue mucho más que una opción académica: fue una forma de tomar partido. “Elegí la carrera por un interés en defender causas justas”, dice.

Su vocación social se cultivó desde casa. En Trujillo, su madre coordinaba la Red de Promoción de la Mujer. “Absorbí esos contenidos desde muy joven. Por eso mi tesis de bachiller fue sobre género”. Ese impulso inicial lo llevó a especializarse en campos que, en apariencia, no siempre se cruzan: género, salud, seguridad social. Pero que en su trabajo se entrelazan con naturalidad.

Archivo de luchas

Cada etapa formativa fue también un punto de partida para nuevas preguntas. Su primera maestría, en Género, Sexualidad y Políticas Públicas por la UNMSM, lo llevó a escribir una tesis que terminaría siendo referencia: ‘La Liberación de la Mujer en el Perú de los 70: Una perspectiva de Género y Estado’. “Esa investigación me transformó. Me hizo investigador”, cuenta. Hoy, esa tesis sigue siendo citada por quienes estudian historia del feminismo en el país.

Luego vendrían nuevas publicaciones. Participó en una contribución sobre salud mental y derechos humanos para la Academia Peruana de Salud, enfocándose en la legislación, los derechos humanos y la salud mental. Más recientemente, desde Inglaterra, ha trabajado temas de salud global, anemia y políticas públicas en colaboración con universidades internacionales.

“Siempre hay un eje reflexivo y otro de análisis aplicado”, resume.

Masculinidades críticas

Desde Posgrado Cayetano, Barboza Tello coordina un programa poco común en la oferta académica latinoamericana: el Diplomado en Masculinidades y Violencia de Género. No se trata solo de repensar lo masculino, sino de intervenir socialmente desde una ética transformadora. El diplomado busca contribuir en la construcción de propuestas que involucren a los varones en las políticas públicas contra la violencia de género y compartir metodologías educativas para trabajar con varones a nivel comunitario. Asimismo, brinda contenidos sobre derechos, igualdad y masculinidades digitales, entre otros puntos.

El programa también forma a profesionales para que analicen fenómenos emergentes como la ciberviolencia contra las mujeres, la intersección entre cambio climático, violencia y género, y otras dinámicas sociales que exigen marcos interdisciplinarios. “Cada vez más necesitamos más especialistas que entiendan la complejidad de la desigualdad desde múltiples frentes”, señala.

Saber situado

El diplomado también ofrece una ventaja competitiva. “Tenemos docentes que concibieron, impulsaron y dirigieron los primeros programas de reeducación de agresores, como por ejemplo el “Programa de Hombres que Renuncian a su Violencia”. Aprender de ellos es entender cómo surgieron estos modelos y cómo se están adaptando a los cambios actuales”, explica Barboza. Esa genealogía es uno de los valores agregados del programa.

Pero no solo se hay una contribución desde la relevancia de los programas e intervenciones. El enfoque también es contemporáneo: derechos humanos en la esfera digital, plataformas virtuales, nuevas formas de violencia de género. Además, la experiencia del equipo docente combina lo académico y la gestión de las políticas públicas. “Buscamos que los profesionales no solo comprendan, sino que intervengan. Que tengan herramientas para actuar”.